3 dic 2010

La sangre también es dulce. I

Soy Anabella, y les quiero contar mi historia.
Soy alta, demasiado pálida.. Tengo cabello largo,color azabache y ojos azules..
Pero esos son detalles; lo que me hace especial, es mi condición... de inmortal.
Pero juro que no quiero lastimarla! Sólo quiero hacerla mía...
Sí, para lograr eso debo beber tan sólo un poco de su sangre, para que así,
obtenga mi condición, y ser su guardiana eterna.
No es fácil conquistarla..
La busco hace mucho tiempo, y solo conseguía su ignorancia.
Solía ser invisible a sus ojos. Solía llegar a creer que era tan sólo un fantasma.
Pero un día de lluvia... (el momento quedo grabado a fuego en mí, como si hubiera sido ayer)
Ese día de lluvia, paso corriendo frente a mí, y me miró a los ojos y sonrió...
Esa sonrisa sólo me dio alegría, y una gran esperanza.
Ella me había sonreído por fin!

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